Alonso y su incesante búsqueda del deber lo ha llevado a tomar decisiones egoístas, abandonando a quienes lo amaban y destruyendo el legado en ‘La Promesa’
Alonso, Marqués de Luján, ha renunciado a su vida en aras de mantener el marquesado, explica JdCienfuegos. Desde la muerte de su hermano Pedro, heredero del título, Alonso asumió el papel y priorizó el legado por encima de todo lo demás. Sin embargo, su compromiso ha desencadenado una serie de sacrificios y abandonos que han marcado su destino.
Alonso se casó con Carmen de Altuna y Pina por su fortuna, no por amor. Este acto egoísta fue motivado por la necesidad de salvar el marquesado de la ruina. A pesar de enamorarse de Carmen, su matrimonio por interés económico sentó las bases para futuros problemas.
El Maltrato y la Negación
Alonso permitió el maltrato de sus hijos, Tomás y Catalina, por parte de su segunda esposa, Cruz. Su negligencia paterna y su consentimiento al sufrimiento de sus hijos muestran una falta de empatía y un egoísmo profundo. Además, toleró el maltrato del servicio por parte de Cruz, abrogándose de su responsabilidad como líder de la casa en ‘La Promesa’.
La Infidelidad y el Hijo Secreto
La aventura de Alonso con Dolores resultó en el nacimiento de Marcos alias Curro, un hijo ilegítimo que ocultó al mundo. Su negativa a reconocer o brindar apoyo a su propio hijo revela un carácter moral cuestionable y un desprecio por la justicia, dentro de ‘La Promesa’.
La Ruina del Marquesado
Alonso llevó al marquesado a la ruina nuevamente después de la muerte de Carmen. Casarse con Cruz, cuya dote salvó temporalmente la hacienda, fue otro matrimonio impulsado por el interés económico. Sin embargo, su incapacidad para administrar adecuadamente las tierras condujo a la bancarrota inminente.
Una Personalidad Resentida
Alonso es un hombre atormentado por el resentimiento. Ha sacrificado su vida personal, sus relaciones y su propia felicidad por un marquesado que no puede mantener. Su constante sensación de deber oculta un vacío interior y una profunda insatisfacción con su existencia, dentro de ‘La Promesa’.
Conclusión
La evolución del personaje de Alonso es un viaje de pérdidas y sacrificios en ‘La Promesa’. Su incesante búsqueda del deber lo ha llevado a tomar decisiones egoístas, abandonando a quienes lo amaban y destruyendo el legado que tanto deseaba preservar. La ruina del marquesado es un reflejo de la ruina interior de Alonso, un hombre que se ha perdido a sí mismo en su obsesión con el poder.
