Jacobo, en el punto de mira de Curro y Lope, mañana en ‘La Promesa’.
Para cimentar un vínculo irrompible entre el duque de Carvajal y Cifuentes y la familia Luján, Leocadia sugiere poner en juego a los recién nacidos de Catalina y Adriano… ¿qué motivo oculta esta propuesta?
Adriano y Catalina por supuesto se niegan en rotundo a establecer cualquier relación con Lisandro y menos involucrar a sus hijos… Pero Leocadia insiste, algo así aseguraría el futuro de los bebés.
Mientras tanto, Curro prosigue su pesquisa sobre Jacobo y descubre un detalle inquietante en su vínculo con Esteban Monteclaro. Desconcertado, recurre a Manuel en busca de aclaraciones.
Afortunadamente, el joven Luján logra arrojar algo de luz sobre la relación familiar entre Jacobo y Esteban Monteclaro, aunque el resultado no es en absoluto el que Curro esperaba.
Curro comparte con Lope lo que ha descubierto y ambos llegan a la conclusión de que el prometido de Martina puede estar ejecutando una venganza sin fundamento.
Paralelamente, Leocadia y Jacobo estrechan su conspiración contra Eugenia, conscientes de que ella, cada vez más firme en el palacio, representa una amenaza para sus designios.
Eugenia, por su parte, guarda en su memoria los oscuros secretos de ambos y su estrecha alianza con el conde de Ayala podría equilibrar la balanza en su favor cuando llegue el momento.
Avance en video del próximo capítulo 603 (martes, 27 de mayo) de ‘La Promesa’
Consciente de ello, Lorenzo y Leocadia emplean todo tipo de artimañas para quebrar la cordura de la hermana de Cruz… y los primeros signos de desestabilización ya comienzan a aflorar.
Sin embargo, su plan pone también en peligro a María Fernández, la encargada de realizar los masajes a Eugenia, pues la droga que han mezclado en el bálsamo también podría penetrar en su cuerpo.
Al mismo tiempo, Jacobo se ve arrastrado por el resentimiento de Martina hacia el duque de Carvajal y Cifuentes, y se adentra en los recovecos de los sentimientos de su prometida.
En otro frente, Ricardo mantiene viva la esperanza de que Santos regrese a La Promesa, aunque cada vez parezca más distante esa posibilidad.
El mayordomo confiesa a Pía el dolor que le provoca la ausencia de su hijo y ambos se preguntan si encontrarán un camino para sanar esas heridas.
Llega el turno de Manuel… Lisandro se encuentra con él en su taller, seguro de que ese trabajo solo es un medio para evitarlo… El duque de Carvajal y Cifuentes encara al heredero de los Luján por haberse casado con «una fregona», culpándolo de todos las las consecuencias que ello ha traído para la familia.
