Nueva Amenaza para Leocadia en ‘La Promesa’, avance del capítulo 568 (miércoles, 2 de abril)

Las insinuaciones de Pía ponen en guardia a Leocadia, mañana en ‘La Promesa’.

En armonía con las intenciones de Curro, Pía tantea a Leocadia comentando la muerte del doctor Gamarra y la posibilidad de que alguien interviniera para precipitar la muerte de Jana.

Leocadia trata de quitarle la idea de la cabeza de forma muy sutil, pero confirma las intenciones de Curro: está claro que es una amenaza para ella.

Todos en el palacio se movilizan para evitar que María Fernández sea despedida y surgen algunas fisuras entre ellos… mientras Santos continúa moviendo hilos para cumplir los deseos de su padre.

Además, deben ocultar la presencia de Antoñito… no solo a los señores y a Petra… algo que no será complicado… También a la propia Simona y a su hijo.

Alonso, que continúa abrumado por la ausencia de su esposa y la incertidumbre respecto al paradero de su hijo, se lleva una nueva sorpresa al descubrir a Leocadia instalada en la habitación de Cruz.

La mujer, fiel a su estilo, se las ingenia para quedarse allí, imponiendo su presencia en un espacio que no le pertenece, pero que parece haber reclamado como propio.

Mientras tanto, Manuel se despide de los ancianos que le acogieron y finalmente emprende su viaje, dejando al marqués aún más inquieto.

Martina, desbordada con las gestiones de la finca, no logra atender otros asuntos y su prometido, Jacobo, empieza a aburrirse ante la falta de atención.

Leocadia, con su habitual capacidad para tomar el control de cualquier situación, propone organizar un picnic, que recae en manos de Curro para su preparación…

En la planta del servicio, la preocupación también va en aumento. Los mayordomos advierten a María Fernández de la fragilidad de su situación, y ella da por hecho que su destino está sellado: será despedida.

Teresa intenta que Petra reconsidere su postura, pero la ama de llaves no está dispuesta a ceder.

Por su parte, Lope mantiene engañado a Antoñito, asegurándole que se encuentra en casa del párroco, y Vera se compromete a ayudarle en su cuidado. A su vez, la relación entre Pía y María Fernández se resiente, ya que la primera se molesta al enterarse de que la doncella ha defendido públicamente a Ana. Lejos de distanciarse, Ana aprovecha para seguir acercándose a Ricardo, lo que incomoda aún más a Pía.

Catalina, por otro lado, se muestra tranquila ante la falta de noticias de Adriano… pero esa calma no durará mucho. Una visita inesperada amenaza con alterar de nuevo el frágil equilibrio de La Promesa.