El secreto mejor guardado de ‘La Promesa’, avance del capítulo 525 (martes, 11 de febrero)
Jana encuentra la conexión entre la habitación secreta y la habitación de la Marquesa, mañana en ‘La Promesa’
Jana descubre lo que se esconde tras la puerta pequeña que hay en la habitación secreta… se trata de un pasadizo que llega directamente a la chimenea de la habitación de la Marquesa. Y con ello se abren nuevas incógnitas: ¿Quién conoce la existencia de ese espacio y con qué objetivo se construyó?
Cruz se enfrenta a Manuel y a Alonso por la decisión de ceder a Catalina el Palacio de Madrid. Además, el Marqués comunica a Rómulo que tendrá que empezar a despedir a miembros del servicio.
Jana sigue obsesionada con desentrañar el misterio del pasadizo que oculta la habitación secreta. Su instinto le dice que la clave para entender el pasado de La Promesa está detrás de esa puerta, y está decidida a llegar al fondo del asunto.
Sin embargo, cada paso que da la acerca más al peligro. Sabe que si alguien la descubre merodeando en lugares prohibidos, podría meterse en serios problemas. A pesar del riesgo, no está dispuesta a detenerse hasta revelar la verdad.
Mientras tanto, Martina ya no puede ocultar sus intenciones. Su lealtad, antes difusa, queda finalmente expuesta, dejando claro a quién decide apoyar en la lucha por el control de La Promesa: su prima Catalina o su tío Alonso.
Por otro lado, Alonso sigue enfrentando la dura realidad económica de La Promesa. Con los recursos agotándose rápidamente, llega a la conclusión de que no tiene más remedio que reducir la plantilla del servicio para recortar gastos.
Sin embargo, Rómulo, fiel al personal y siempre astuto, interviene con una propuesta que podría evitar los despidos. Su plan podría ser la última oportunidad para mantener la estabilidad dentro del palacio, pero convencer al marqués no será tarea fácil.
Mientras tanto, María Fernández se ve acorralada. Ha intentado evitar el tema y mantener las apariencias, pero cuando alguien empieza a indagar en su relación con el cura, se da cuenta de que ya no tiene escapatoria.
No le quedará más remedio que admitir la verdad, enfrentándose a las consecuencias de sus sentimientos por Samuel y a lo que eso podría significar para su futuro.
Finalmente, Ricardo sigue manteniéndose firme en su negativa a ceder ante Ana. No quiere que su esposa tenga poder sobre él ni que interfiera en su vida, pero su resistencia se tambalea cuando Santos, inesperadamente, le hace una petición que lo deja sin opciones.