José Juan confirma las palabras de Matilde y se lo hace saber a Lorenzo, mañana en ‘La Promesa’.
José Juan no encaja las palabras de Matilde, pero acaba comprobando por él mismo que entre Curro y Martina hay algo más que amistad… y así acaba confesándoselo al capitán.
María Fernández, cada vez más prendada del padre Samuel, intenta constatar que no es cura por vocación y Vera trata de manejar la situación, tomando una decisión que podría afectar a el futuro de todos en La Promesa.
Avance en video del próximo capítulo 488 (jueves, 19 de diciembre) de ‘La Promesa’
La relación entre Cruz y Manuel atraviesa un momento difícil debido a la indiferencia de la marquesa respecto a la desaparición de Jana. Manuel empieza a ver con claridad que el comportamiento reciente de su madre hacia su prometida ha sido una farsa bien orquestada.
La actitud de Cruz, que no muestra ningún interés por ayudar a encontrar a Jana, desata una nueva y amarga discusión entre madre e hijo.
Buscando consuelo, Manuel decide hablar con Alonso. Para sorpresa de Manuel, su padre muestra una inesperada compasión por el dolor que atraviesa, evidenciando un lado más humano que rara vez se ve en él.
Mientras tanto, Pelayo regresa en secreto a las tierras de La Promesa, procurando pasar desapercibido ante el servicio y los trabajadores. Sin embargo, su regreso no pasa desapercibido del todo, ya que Martina y Catalina se cruzan con él durante un paseo a caballo.
Martina, siempre astuta, logra despistar a Catalina lo suficiente para enfrentarse a Pelayo a solas. Le advierte con firmeza que debe alejarse de su prima y, para proteger a Catalina, decide ocultarle lo ocurrido.
Por otro lado, las tensiones entre Curro y José Juan siguen creciendo tras su reciente enfrentamiento. Manuel intenta mediar en la situación y hacer entrar en razón a José Juan, pero Lorenzo, lejos de calmar los ánimos, interviene para exacerbar aún más el conflicto.
En otro rincón de La Promesa, María Fernández, intrigada por Samuel, empieza a interesarse en su pasado. El párroco, que ha logrado ganarse su atención, decide abrirse con ella y le revela cómo nació su vocación. María escucha atentamente, aunque no está claro si esto logrará disipar las dudas que la atormentan.
Por su parte, Marcelo y Vera, fortalecidos por la confianza mutua que ha surgido tras compartir sus difíciles historias, toman una decisión importante: acudir a la Guardia Civil para denunciar al Duque de Carril, pese a los riesgos que esta acción pueda acarrear.
Mientras todo esto ocurre, la desaparición de Jana sigue siendo un asunto sin resolver. Manuel, cada vez más inquieto y desesperado, teme que no volverá a verla jamás, y la incertidumbre comienza a consumirlo.
