:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fff7%2Ff29%2Fc22%2Fff7f29c224dd1ac3cf12234f794885bf.jpg)
La alianza de Petra y Martina
Petra le confiesa a Martina cómo fue su relación sentimental con el conde de Ayala: «Yo le libere de sus responsabilidades como padre porque no quería ocasionarle ningún problema».
La joven le responde muy seria: «Ese hombre es un indeseable», y le comenta: «Tenemos que hacer algo, no podemos dejar que ese mal nacido viva su vida con impunidad».
La ama de llaves le dice muy emocionada: «Yo fui una pánfila señorita», a lo que Martina le pide: «Tenemos que vengarnos de él y para eso tenemos que estar muy unidas, ¿estás dispuesta?»
Petra muestra un rostro con odio y le contesta: «Completamente señorita pero con una condición». La sobrina del marqués le dice: «Tú dirás», la ama de llaves le explica con frialdad: «Antes de darle la estocada final a Ayala, divirtámonos un poco con él».
Martina le responde con asombro: «No sé si le estoy entendiendo», pero Petra le aclara: «Antes de darle el golpe definitivo a Ayala juguemos un poco con él, déjame disfrutar viéndolo sufrir señorita».
La joven está de acuerdo y le responde: «Las dos disfrutaremos si lo torturamos un poco antes».
