Avance del capítulo 206 (lunes, 9 de octubre): Petra a cambio del futuro de Dieguito
‘La Promesa’ inicia una nueva semana con el regreso de Petra, la incógnita de la desaparición de Ramona, la difícil situación de Jimena y Abel y un nuevo movimiento de Margarita. Recordamos además que el jueves 12 de octubre no habrá emisión por ser festivo nacional.
Como era de esperar, el chantaje de Pía a la marquesa no sale como ella pretendía. Y es que, su jefa le ha impuesto una condición en el contrato si quiere que lo firme.
Algo que no esperaba y que la deja en un callejón sin salida. El ama de llaves se excusa y le pide tiempo para valorar la propuesta.
Y la condición no es otra que el regreso de Petra. Cruz establece que, si es ella quien va a pagar por la desaparición de Dieguito como responsable, ¿por qué habría que mantener a la doncella fuera del palacio?
Pía se ve entre la espada y la pared. La protección de su hijo a cambio del regreso de alguien como Petra, que ha sido capaz de organizar su secuestro…
De nuevo, Rómulo se convierte en su principal consejero. Al fin y al cabo, es la única persona que conoce la situación. Sin embargo, Pía aún debe madurar su decisión.
Simona está triste por su gran amiga Candela, quien está muy equivocada en cuanto a las intenciones de Carlos sobre su futura boda.
Y es que la cocinera conoce la causa real del extraño comportamiento del maestro con su amiga… La cocinera de la Promesa se sincera con Lope sobre el asunto.
Jana está nerviosa tras encontrar el abanico de Cruz en la cabaña de Ramona. Sin duda, tiene entre manos algo que podría hacer caer a la propia Marquesa.
Pero también sabe que es complicado y se pondría en un grave peligro.
La chica comparte con Curro lo que ha descubierto, esperando que él encuentre una forma de utilizar tal hallazgo sin complicar más las cosas.
El chico cree que lo mejor es acudir a Manuel, pues todo apunta a que la marquesa está detrás de la desaparición de la mujer.
Jimena continúa con el plan trazado con Abel para fingir perder al niño. No es otro que mantener su euforia energética.
A solas, admite que está cansada de aparentar y no puede ocultar la tristeza que le produce saber que cuando todos crean que ha perdido al niño, ya no significará nada para Manuel.
Alonso ofrece su ayuda a Margarita para gestionar la herencia de su hermano Fernando, pero su cuñada le sorprenderá con una inesperada petición.
