Jimena está harta de mantener la mentira sobre su embarazo y está dispuesta a acabar con una situación insostenible, sin embargo… ¿qué ocurrirá después? Mañana en ‘La Promesa’.
Jana entrega a Manuel el abanico de Cruz y lo pone al tanto de sus sospechas sobre la implicación de su madre en la desaparición de Ramona.
Sin embargo, el chico no reacciona de la manera que ella esperaba… lo que provoca una gran decepción en la doncella… ¿es que no piensa plantarle cara a su madre?
Al mismo tiempo, aparecen nuevas hipótesis sobre la desaparición de Ramona, quizás la mujer ha decidido marcharse.
Jana sigue convencida de que esa mujer no se fue por voluntad propia.
Catalina parece haber encontrado en Pelayo la horma de su zapato. El joven se ofrece a ayudarla en la fabricación a gran escala de las mermeladas para exportarlas a toda la península.
Sin duda, supone un paso más en su relación, la cercanía entre ambos es cada vez más patente.
A Lorenzo cada vez le aburre más su estancia en la Promesa… por lo que planea viajar a Córdoba para visitar su casino.
Es algo que Alonso no ve apropiado dado el poco tiempo que ha pasado desde la muerte de Fernando, pero quizás puedan hacer algo para entretenerlo.
Catalina y Pelayo comparten con el Marqués su intención de producir mermeladas y exportarlas a todo el país, buscando su beneplácito.
Alonso acepta, una decisión que alegra a los chicos, sin ser conscientes de que ello traerá consecuencias inesperadas para Lope, que deberá abandonar las cocinas y volver a ejercer como lacayo por decisión de la Marquesa.
El plan de Jimena y Abel sigue adelante pese a la impaciencia de la chica, que ve como todos anteponen al bebé que espera por encima de ella.
Por ello, cree que ha llegado el momento de poner fin a todo.
