María Antonia está cada vez más preocupada por el comportamiento de Cruz y cae en los brazos de Lorenzo, que le propone un juego peligroso, mañana en ‘La Promesa’.
Jana y Manuel cada vez contienen menos su amor, fruto de ello es que Rómulo haya descubierto la relación que hay entre ellos. Conscientes de que no podrán ocultarlo por mucho tiempo, el heredero de los Luján está dispuesto a contarlo todo.
Mientras, la desconfianza de Cruz en María Antonia es cada vez mayor. La mujer está segura de que sabe lo que ha ocurrido entre ella y Alonso y se desahoga con Lorenzo, quien le propone un juego un tanto peligroso.
Avance en video del próximo capítulo 406 (miércoles, 14 de agosto) de ‘La Promesa’
Gracias a la firme oposición de los hombres de la familia y, al parecer, a la intervención de Margarita, Ayala finalmente cede, y Martina no ingresa en el convento como estaba planeado.
Este desenlace supone un alivio para todos, especialmente para Martina, quien se enfrenta a un futuro incierto pero fuera de las paredes del convento.
Por otro lado, Josefa, la suegra de Virtudes, justifica su repentina partida alegando que han sido desahuciados de su hogar y ya no pueden hacerse cargo del niño.
Mientras tanto, María Fernández y Salvador retoman la organización de su boda con renovada energía, preparando cada detalle para lo que esperan sea un día inolvidable.
Por su parte, Santos, siguiendo los consejos de Petra, hace un esfuerzo por reducir la tensión con Vera, buscando restaurar la paz entre ambos.
Cruz, consumida por la sospecha de una posible infidelidad de Alonso con su amiga, vuelve a presionar a María Antonia para que abandone el palacio, intentando así proteger su relación y su orgullo.
Por otro lado, Manuel, tras descubrir que Pía sigue viva, hace a Jana una petición que la deja desconcertada, sin saber cómo responder.
Mientras todo esto sucede, lejos del tumulto, Catalina parece haber recuperado la sintonía y el entendimiento con Pelayo, ofreciendo un rayo de esperanza en medio de tantas turbulencias.
