Avance de ‘La Promesa’ del próximo capítulo con la marcha de Jana y María y su plan tácito
Martina sufre un sorprendente, inexplicable y brutal ataque de Juana, su compañera de habitación en el manicomio, y lo ocurrido llega a La Promesa y todos, como es lógico, se preocuparán mucho. Aunque eso no es lo peor que está por llegar para Martina en ese sanatorio. Ella defiende que fue Juana quien empezó el altercado ante los responsables del centro, pero no la creen.
Rómulo, apresurado, da cuenta a Alonso de la reaparición de Gregorio en palacio y acuerdan tomar una medida radical: ordenar la salida de Jana de La Promesa durante un tiempo para que pueda llevarle provisiones a la señora Adarre sin levantar sospechas. Se trasladará un tiempo junto a María Fernández, que descubrirá toda la verdad, a la cueva donde la criada se halla escondida mientras todos creen que está muerta.
La relación entre Catalina y Adriano se va estrechando cada vez más y la tensión entre ambos es indudable. Tanto, que llegan a tener relaciones íntimas. Parecido ocurre entre Vera y Lope, que se funden en un apasionado beso. La doncella le dice al cocinero que está enamorada de él y le promete lo más sorprendente: está dispuesta a enfrentarse a Santos para poner fin a su chantaje. Sin embargo, se ve desarmada cuando el lacayo, tras su conversación con Rómulo, le pide perdón, dispuesto a cambiar su actitud.
Por último, llegan malas noticias a La Promesa sobre la guerra. El contacto militar de Lorenzo informa de que ha habido varios ataques del enemigo con muchos muertos. Al tiempo, la familia Luján recibe una visita sorpresa en La Promesa que no se esperaban ni por asomo: Curro ha vuelto.
Avance de ‘La Promesa’ del capítulo 391 – Jueves 4 de julio
Vera acepta el propósito de enmienda de Santos, aunque solo para ser amigos, no más. Jana y María Fernández se van de La Promesa y se reúnen con Pía en la cueva, donde permanecerán un tiempo mientras se calman las cosas con Gregorio.
Entretanto, María Antonia se presenta ante Lorenzo como una víctima de los impulsos del marqués y le cuenta que Alonso le ha besado cuando realmente fue ella quien lo hizo. Y Ricardo empieza a recelar de Virtudes tras pillarla en una gran mentira.
Por su parte, Martina sufre un auténtico calvario en el sanatorio donde es sometida a unos tratamientos terribles y a torturas como castigo por el incidente con Juana. Tratamientos que, poco a poco, van minando su voluntad.
En paralelo, la relación de Catalina y Adriano era más cercana que nunca, pero, de la noche a la mañana, la joven se muestra distante con él. ¿Qué habrá pasado?