Avance del capítulo 375 (martes, 11 de junio): Lorenzo investiga la relación de Alonso y María Antonia
En el capítulo del Martes de ‘La Promesa’, el conflicto entre Simona y Virtudes persiste, con heridas aún abiertas. La tensión entre madre e hija ha alcanzado un punto crítico, y cada interacción está cargada de resentimiento y dolor acumulado.
Sin embargo, Simona, impulsada por el amor maternal, busca un acercamiento con su hija, con la esperanza de dejar atrás los malos momentos y reconstruir su relación. Esta tarea no será fácil, pero Simona está dispuesta a hacer lo que sea necesario para recuperar a Virtudes.
Mientras tanto, Petra, al enterarse de que se está fraguando otro homenaje en honor a Pía, decide sabotearlo. Sus malas intenciones se hacen evidentes mientras trama cómo impedir que se lleve a cabo el homenaje.
Petra ve en este homenaje una amenaza a su control y autoridad, y está decidida a mantener su posición, aunque signifique destruir los esfuerzos de los demás para honrar la memoria de Pía.
La reconciliación entre Catalina y Adriano parece imposible, pero una carta de ella podría cambiar todo. La carta, cargada de sinceridad y arrepentimiento, tiene el potencial de dar un giro de ciento ochenta grados a su relación.
Catalina ha puesto su corazón en esas palabras, esperando que Adriano pueda ver más allá de las heridas pasadas y considerar una segunda oportunidad para su amistad, o tal vez algo más.
Lorenzo sigue investigando qué ocultan María Antonia y Alonso, desconfiando cada vez más. Su mente no deja de trabajar, imaginando las posibles conspiraciones y secretos que podrían estar guardando.
Decide hacer un último intento de acercamiento con ella, buscando respuestas a sus sospechas. Su determinación es fuerte, y está dispuesto a utilizar todas las estrategias a su disposición para descubrir la verdad.
Lope, en un momento de vulnerabilidad, confiesa a Vera que tiene problemas económicos. Las consecuencias de su estilo de vida empiezan a afectar gravemente su salud, generando preocupación entre quienes lo rodean.
Vera, al escuchar su confesión, siente una mezcla de compasión y desesperación, sabiendo que deben encontrar una solución antes de que sea demasiado tarde. La situación de Lope se convierte en una carga que ambos deben llevar, enfrentando juntos las dificultades que se avecinan.